miércoles, 24 de agosto de 2011

Para siempre.

+ Yo te prometo un para siempre. ¿Y tú a mi?
- Eso es demasiado tiempo, todo se puede torcer y podemos acabar odiándonos.
+ Bueno, aunque te odie, si me necesitas, iré.
- No lo creo. Si me odias, no me querrás ver.
+ Pues cerraré los ojos.
- ...No me querrás oír. 
+ No te dejaré hablar.
- ¿Entonces?
+ Entonces te abrazaré y te diré "¿Te acuerdas de aquella tarde en la que te prometí un para siempre? Pues lo decía en serio".









No hay comentarios:

Publicar un comentario