viernes, 2 de septiembre de 2011

+ ¿Cómo supiste que te habías enamorado?
- ¿No lo sabes?
+ Pues no...
- Bien. Cierra los ojos, y no los abras. 
+ Ya. ¿Y ahora qué hago? 
- Quédate ahí.
+ Pero ¿y si te vas? ¿cómo voy a saber que aún sigues aquí?
- Era ese miedo a perderte lo que me hizo saber que te necesitaba. Fue así mismo como me percaté de que me había enamorado. ¿Lo entiendes ahora?


1 comentario: